Una tarde, en la ciudad de Laboulaye se corría un rumor de que a una nena de 7 años su hermano mayor intentó asesinarla, la encerró en el baño colocándole una bolsa en su cabeza.
Los hermanos se encontraban solos en su casa, porque sus padres habían fallecido en un accidente, de esa forma quien había quedado a cargo de la menor era su hermano Martín de 26 años.
Un día el único vecino que tenía en ese barrio tan desolado, se cambiaba de casa y antes de irse le preguntó si necesitaban algo, el chico dijo que le hacía falta una bolsa negra para envolver la basura que acumulaban habitualmente, entonces el vecino si dudar se la acercó. Martín le agradeció y se despidieron, pero en realidad, esa bolsa era para guardar y enterrar a su hermana. En cuanto el vecino se retiró, el chico entró al baño, guardó la nena, que había muerto asfixiada y la enterró en el fondo de su patio.
Después de un tiempo Martín se puso a pensar y a reflexionar sobre lo que habñia hecho y estaba muy arrepentido. Evidentemente él no se encontraba en un buen estado psicológico, y después de su arrepentimiento decidió suicidarse, porque pensaba que no tenía perdón.
A partir de ese día la casa quedó en el medio de la nada y nunca más volvieron a habitarla.
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